El primer SUV totalmente eléctrico de ŠKODA, el ENYAQ iV, dispondrá de una autonomía de hasta 500 kilómetros en el ciclo de medición WLTP. Se ofrecerá más información tras el lanzamiento oficial.
Tomemos el CITIGOe iV como ejemplo. En un rango real de 180 a 260 kilómetros, se puede viajar con la comodidad habitual.
En comparación con otras baterías, una batería de iones de litio hace gala de una alta densidad de energía, buen comportamiento sonoro y notables características de seguridad (aceleración rápida) con un mínimo efecto memoria, una larga vida útil y un coste de mercado que se puede ver aún más reducido en los próximos años. Por lo tanto, las baterías de iones de litio cumplen los requisitos de ŠKODA en cuanto a idoneidad para el día a día, vida útil y criterios de seguridad.
Puedes estar seguro de que todos los vehículos eléctricos de ŠKODA están equipados con baterías de iones de litio de alto voltaje de tecnología punta para garantizar la mayor densidad de energía posible.
Tomemos el CITIGOe iV como ejemplo. El CITIGOe iV ofrece una autonomía según WLTP de 260 km. Además, especificamos que tiene una autonomía práctica de 180-260 km, donde el valor más bajo se refiere a condiciones subóptimas (por ejemplo, temperatura exterior muy baja).
ŠKODA garantiza una duración de la batería de ocho años o 160 000 km.
En los casos cubiertos por la garantía, se puede cambiar la batería. Garantía para baterías de alto voltaje BEV: 8 años o 160.000 km (lo que ocurra primero) y deberá alcanzarse hasta un 70% de un contenido neto de energía útil de la batería. Garantía para baterías de alto voltaje PHEV: 8 años o 160.000 km (lo que ocurra primero).
Afortunadamente, las baterías pueden reciclarse y hasta un 96 % de los materiales que las componen se pueden recuperar. Existen dos modos de reciclar una batería una vez que llega a la planta de reciclaje. Si las baterías ya no llevan carga, se pueden simplemente desmontar para separar los componentes metálicos como el cobre y el acero. Si las baterías aún llevan carga, se desmenuzan tras haber sido congeladas en nitrógeno líquido (para que no reaccionen al ser despedazadas).
El reciclaje de las baterías es crucial para nuestro sector. Las baterías de iones de litio se pueden reciclar, pero el coste es excesivamente alto. A medida que se extienda la movilidad eléctrica, la producción de baterías de iones de litio aumentará, de forma que crecerá la demanda de materias primas y habrá más baterías que lleguen al final de su vida útil. Esto fomentará el desarrollo de métodos de reciclaje más baratos y efectivos.
Aun cuando la batería llega al final de su vida útil en el coche, el reciclaje no es la única opción. Estas baterías se pueden reconvertir en dispositivos para almacenar energía, así que su vida útil general se alarga muchos años. En otras palabras, damos a nuestras baterías una segunda vida.
El proceso de extracción del litio es muy complejo, así que, en pocas palabras: sí, las últimas tecnologías de separación nos permiten reciclar hasta un 96 % de nuestras baterías de iones de litio y seguimos investigando continuamente la recuperación de grandes proporciones de materiales valiosos.
ŠKODA AUTO tiene preparado un programa para el uso secundario de baterías de coches directamente en nuestros concesionarios y en el operativo de ŠKODA AUTO. La capacidad remanente de las baterías que ya no sean aptas para el funcionamiento de vehículos se utilizará para almacenar energía para el funcionamiento técnico de los centros de servicio y las plantas de producción.
Las baterías de los vehículos eléctricos de ŠKODA ofrecen el máximo nivel de seguridad en caso de accidente, sobrecalentamiento o cortocircuito. Estos coches pasan pruebas de calidad y de colisión, al igual que otros vehículos, y cumplen los estándares de seguridad más estrictos.
La batería se instala en el suelo del vehículo, centralmente, entre los ejes. Esto crea un centro de gravedad con una distribución óptima del peso en los ejes frontal y trasero que implica unas muy buenas características de conducción deportiva y en curvas.
Al contrario; una de las mayores ventajas de los vehículos eléctricos es su amplitud y su variabilidad interior. Es cierto que se necesitan muchas baterías para garantizar una distancia de conducción adecuada, pero estas se sitúan en el suelo del coche. Esto no solo evita que resulten un obstáculo, sino que, además, crean un centro de gravedad bajo, lo que permite un manejo mucho mejor del coche. El propio motor eléctrico ahorra mucho espacio en comparación con los diseños de motor convencionales. No se necesita una gran transmisión y los motores eléctricos son considerablemente más pequeños que los de combustión.
La batería se instala en el suelo del vehículo, entre los ejes delantero y trasero. Este es el lugar más seguro del vehículo y, gracias al centro de gravedad bajo, se dan unas muy buenas características para la conducción deportiva y en curvas. Por lo tanto, el volumen del maletero permanece idéntico. Únicamente ha habido que elevar ligeramente el punto de reposo para los pies de los pasajeros de la parte posterior para acomodar la batería.
En general, la batería es el factor principal en el precio de un vehículo eléctrico. La batería es más cara en los modelos pequeños y más barata en los grandes. A medida que los coches eléctricos se vayan popularizando, el precio de las baterías irá bajando y los coches eléctricos serán más asequibles.
Sí, la hay. Son diferencias fundamentales en la capacidad y el diseño. Las baterías PHEV tienen menos capacidad y, por lo general, se sitúan hacia la parte trasera del vehículo, bajo la segunda fila de asientos, ya que el vehículo debe acoger también el motor de combustión interna. El diseño de las baterías BEV, que recuerda un poco a un monopatín, es consecuencia de su ubicación en el suelo del vehículo. Dado que los BEV no llevan motor de combustión interna, la batería tiene, lógicamente, más capacidad.